Marketing digital vs tradicional

¿Qué tipo de marketing es mejor para tu negocio?

Si le estás dando vueltas a qué tipo de marketing sería el más eficiente y adecuado para tu perfil de empresa debes conocer las diferencias más relevantes que existen entre estos dos caminos para promocionar tu negocio y poder fusionarlos para crear el tuyo propio.

¿Qué es el marketing y cuál es su función?

El marketing es un conjunto de técnicas y estrategias utilizadas para promocionar y vender productos o servicios. Su objetivo principal es comprender las necesidades y deseos del mercado objetivo y satisfacerlos de manera rentable para la empresa.

La función principal del marketing, sea convencional o digital, es llevar a cabo una estrategia comercial que atraiga, mantenga y fidelice a los clientes al satisfacer sus necesidades desde la compresión de las necesidades y deseas de ese mercado objetivo.

Ahora que entendemos esto, el siguiente paso es entender la perspectiva de ambos conceptos.

Marketing tradicional

El marketing tradicional se concentra principalmente en impulsar las ventas, poniendo énfasis en destacar el producto o servicio ofrecido a través de los medios tradicionales como son los medios impresos, rotulación, vallas publicitarias, eventos promocionales, merchandising, radio, televisión, llamadas telefónicas que tanto odiamos, incluso entrarían dentro del marketing tradicional las relaciones públicas y el boca a boca.

Este enfoque se refleja en una variedad de canales de comunicación que suelen utilizarse, como las ventas directas, la publicidad en medios como prensa, radio y televisión, la participación en eventos, la distribución de material impreso como folletos y volantes, así como la implementación de elementos visuales en los puntos de venta, conocidos como P.O.P (punto de compra).

En resumen, el marketing tradicional busca llegar a los clientes potenciales de manera directa y a través de medios de comunicación masivos para impulsar las ventas de productos o servicios.

Ejemplos de marketing en medios tradicionales:

  • Publicidad en medios impresos: Anuncios en periódicos, revistas y folletos.
  • Publicidad en radio y televisión: Anuncios transmitidos en estaciones de radio y canales de televisión.
  • Marketing directo: Enviar correos postales, catálogos o folletos promocionales a los clientes potenciales.
  • Telemarketing: Llamadas telefónicas a clientes potenciales para promocionar productos o servicios.
  • Vallas publicitarias: Anuncios colocados en vallas a lo largo de carreteras y áreas urbanas.
  • Eventos promocionales: Organizar eventos como ferias comerciales, exhibiciones y patrocinios para promocionar la marca o los productos.
  • Merchandising en punto de venta: Colocación estratégica de productos y material promocional en tiendas para atraer a los clientes.
  • Marketing de boca a boca: Fomentar que los clientes recomienden el producto o servicio a través del boca a boca.
  • Relaciones públicas: Manejo de la imagen pública de la empresa a través de comunicados de prensa, eventos y actividades para generar cobertura mediática positiva.
  • Marketing de guerrilla: Utilización de tácticas no convencionales y creativas para llamar la atención del público, como por ejemplo, intervenciones urbanas o eventos sorpresa.

Marketing digital

El marketing digital se fundamenta en una estrategia que aprovecha las herramientas y plataformas disponibles en el entorno digital para establecer una comunicación directa y personalizada con los usuarios, atendiendo específicamente a sus necesidades y preferencias. Sus canales abarcan una amplia gama de recursos digitales, tales como páginas web, redes sociales, sistemas de gestión de relaciones con los clientes (CRM), páginas de destino (landing pages), correo electrónico (e-mail marketing) y motores de búsqueda, entre otros.

En otras palabras, el marketing digital se centra en aprovechar el potencial de internet y las tecnologías digitales para interactuar de manera efectiva con los clientes y prospectos. A través de estas plataformas, las empresas pueden segmentar su audiencia, personalizar sus mensajes, medir el rendimiento de sus campañas y, en última instancia, generar resultados tangibles en términos de alcance, compromiso y conversión. 

Ejemplos de marketing digital:

Claro, aquí tienes algunos ejemplos de estrategias de marketing digital:

  • Publicidad en redes sociales: Las plataformas como Facebook, Instagram, Twitter y LinkedIn ofrecen opciones de publicidad altamente segmentadas que permiten llegar a audiencias específicas según sus intereses, demografía y comportamiento en línea.
  • Marketing de contenidos: Crear y compartir contenido relevante y valioso, como blogs, videos, infografías y podcasts, con el objetivo de atraer, involucrar y retener a una audiencia específica.
  • SEO (Optimización de Motores de Búsqueda): Optimizar el contenido y la estructura de un sitio web para mejorar su visibilidad en los resultados de búsqueda orgánica de motores como Google, aumentando así el tráfico orgánico y la relevancia en línea.
  • Email marketing: Enviar correos electrónicos personalizados y segmentados a una lista de suscriptores con el fin de promocionar productos, servicios, contenidos o eventos, así como para mantener y nutrir relaciones con los clientes.
  • Marketing de influencers: Colaborar con personas influyentes en línea, como blogueros, YouTubers e Instagrammers, para promocionar productos o servicios a su audiencia establecida, aprovechando su credibilidad y alcance en línea.
  • Marketing de afiliación: Establecer asociaciones con sitios web o individuos (afiliados) que promocionan productos o servicios a cambio de una comisión por cada venta generada a través de su enlace de afiliado.
  • Marketing de motores de búsqueda (SEM): Utilizar anuncios pagados en motores de búsqueda como Google Ads para aparecer en los resultados de búsqueda patrocinados cuando los usuarios buscan palabras clave relacionadas con el negocio.
  • Marketing de redes sociales: Mantener una presencia activa en plataformas sociales, interactuar con la audiencia, compartir contenido relevante y promover productos o servicios a través de publicaciones orgánicas y pagadas.

Ahora que hemos explorado con mayor profundidad estos conceptos, podemos identificar las diferencias clave entre el marketing tradicional y el marketing digital.

Vamos a analizarlos puntos por punto

  1. ¿Cómo se dividen las audiencias? En el marketing tradicional, se segmentan audiencias considerando datos demográficos como la edad, ubicación, ingresos y nivel educativo. Por otro lado, en el marketing digital, se tienen en cuenta además los intereses y preferencias del público objetivo, junto con datos demográficos como edad, ingresos, ubicación geográfica y nivel educativo.
  2. ¿Qué tipo de comunicación se emplea? El marketing tradicional sigue un enfoque de comunicación lineal, donde el mensaje se transmite a través de medios masivos con la intención de influir en la decisión de compra, pero sin posibilidad de una respuesta directa del receptor. En contraste, en el ámbito digital, la comunicación es bidireccional e interactiva entre la marca y el usuario, lo que permite respuestas inmediatas y relaciones más cercanas, adaptando el mensaje según las necesidades del público.
  3. ¿Dónde se hacen presentes? El marketing digital se despliega únicamente en plataformas online, alcanzando a aquellos con acceso a internet. Por el contrario, el marketing tradicional llega también a personas que no están conectadas a la red y prefieren consumir medios convencionales.
  4. ¿Cuál es más rentable? Una de las ventajas del marketing digital sobre el tradicional es su relativa economía. Por ejemplo, crear y mantener una presencia en línea a través de una página web y redes sociales suele ser más económico que producir y difundir anuncios en medios convencionales como televisión, radio o impresos. Mientras que en el marketing digital inicialmente se pueden encontrar opciones gratuitas, como el uso de redes sociales, para lograr un alcance significativo y dirigirse a la audiencia adecuada, es necesario invertir en recursos como la publicidad en redes sociales y la adquisición de dominios para sitios web.
  5. ¿Cómo se evalúan? El marketing digital destaca por su capacidad de medición precisa y en tiempo real. Herramientas específicas permiten calcular la efectividad y el alcance de las estrategias digitales al instante. En contraste, el marketing tradicional se evalúa a través de métodos más convencionales, como encuestas de satisfacción y mediciones de audiencia, que requieren tiempo para ser recolectadas, analizadas y tabuladas.

Ventajas del marketing tradicional

  • Alcance amplio de audiencia.
  • Establecimiento de relaciones directas y físicas con los prospectos.
  • Campañas de prueba, como degustaciones, generan una sensación de importancia en el cliente.

Ventajas del marketing digital

  • Resultados rápidos y efectivos.
  • Mayor interacción con la audiencia.
  • Adaptación ágil a los cambios en los hábitos de consumo.

¿Qué podemos concluir de todo lo que hemos visto?

Ahora que conoces las diferencias fundamentales entre los dos tipos de marketing que podemos utilizar para promocionar nuestro negocio tienes que decidir qué cojo de cada uno para crear mi propio camino (plan de marketing) y llegar a mi público de la manera más eficiente y rentable posible.

La relación entre el marketing tradicional y el marketing digital es como dos piezas complementarias en un rompecabezas: cada una tiene su lugar, pero juntas forman una imagen completa y efectiva.

El marketing tradicional, con su alcance masivo y su contacto directo con los clientes potenciales, establece una base sólida para la promoción de productos y servicios. Sus tácticas físicas, como eventos en vivo y campañas en medios convencionales, crean una conexión tangible y memorable con la audiencia.

Por otro lado, el marketing digital brinda agilidad, interactividad y resultados rápidos. A través de plataformas online, se puede llegar a segmentos específicos de la audiencia con mensajes personalizados y medir el impacto de manera casi instantánea. Esto permite una adaptación ágil a las tendencias del mercado y una mayor eficiencia en la inversión publicitaria.

Sin embargo, ninguno puede operar en su máximo potencial sin el otro. El marketing tradicional puede carecer de la precisión y la inmediatez del marketing digital, mientras que este último podría perder el contacto humano y la amplitud de alcance que ofrece el marketing tradicional. Juntos, forman un enfoque integral que aprovecha lo mejor de ambos mundos para llegar de manera efectiva a la audiencia y cumplir los objetivos comerciales.